Las gobernadoras, gobernadores y el jefe de Gobierno emanados de Morena condenaron las declaraciones del dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, quien llamó a los padres de familia a destruir los libros de texto que va a repartir la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el próximo ciclo escolar.
En un comunicado conjunto, los 22 mandatarios estatales morenistas compararon su actitud con la de dictadores como Adolfo Hitler o Augusto Pinochet, quienes dijeron, mandaron a quemar libros.
“Siempre que se quiso impedir el avance democrático, cultural y humanístico de la sociedad se impulsó la destrucción de los libros”, señalan los gobernadores.
Destacan que contrario a lo que el PAN propone, los gobernadores morenistas apoyan la distribución de los libros de texto entre la niñez y que se lean.
“No se podía esperar mucho de la derecha conservadora del país, se desenmascara y quedan evidenciados como los retrógradas que son… Bien vale la pena recordarles que esa actitud de destrucción de los libros fue impulsada y llevada a cabo por los personajes más siniestros de la historia reciente de la humanidad. Adolfo Hitler mandó a quemar libros hace 90 años; el dictador Pinochet en Chile hizo lo mismo, inmediatamente después del golpe de estado que lo llevó a usurpar el poder”, refieren los gobernadores morenistas.
Las gobernadoras, gobernadores y el jefe de gobierno respaldamos la distribución de los libros de texto en todas las primarias del país.Garantizaremos una educación de calidad para nuestra niñez sin que nadie se quede sin sus libros. pic.twitter.com/hn5zH1Zadu— Alfonso Durazo (@AlfonsoDurazo) August 3, 2023
Reclaman que los panistas no solo quieren que la gente “pase por alto aquellos pasajes nefastos de la historia, sino también, pretenden ignorar el papel trascendental de los libros de texto gratuitos para nuestra niñez, probablemente su único acceso a su primer libro de lectura”.
Además, dicen que “los voceros de la derecha” se oponen al desarrollo integral de niñas y niños desde el conocimiento científico, histórico, cultural y humanístico y con pretextos “banales y faltos de argumentos convincentes”, la oposición no quiere la distribución de los textos para la educación formal de los niñas y niños del país.
“Saben que un pueblo educado y bien informado no será susceptible de engaños ni podrá ser manipulado, ya no podrán retenerlo eternamente en la ignorancia para ser explotado. Además, con esa postura de destrucción de los libros, inverosímil para nuestra época, ocultan otra verdad: se les acabó aquel negocio de impresión de libros que traían en el anterior régimen y que les permitía corromper su producción al mejor postor”, refieren los gobernadores en un comunicado.
Fuente: Político MX