El servicio de monitoreo del cambio climático de la Unión Europea anunció este miércoles que cada uno de los últimos 12 meses ha sido el más cálido registrado en comparaciones interanuales. El secretario general de la ONU, António Guterres, hizo un llamado urgente a tomar medidas para evitar un "infierno climático".
El Servicio de Cambio Climático de Copernicus informó que la temperatura media mundial en el periodo de 12 meses hasta finales de mayo fue 1.63 grados Celsius por encima de la media preindustrial, estableciendo un nuevo récord desde que se iniciaron los registros en 1940.
Aunque esta media anual no implica que el mundo haya superado el umbral de calentamiento global de 1.5°C, que se refiere a una temperatura media calculada en décadas, los científicos advierten que superar este límite resultaría en impactos más extremos e irreversibles.
En un informe paralelo, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) de la ONU señaló que hay un 80 por ciento de probabilidades de que al menos uno de los próximos cinco años registre una temperatura media que supere temporalmente los 1.5°C por encima de los niveles preindustriales, en comparación con el 66 por ciento estimado el año pasado.
Guterres subrayó la urgencia con la que el mundo está avanzando en la dirección equivocada, alejándose de la estabilización climática.
"En 2015, la posibilidad de que ocurriera tal ruptura era casi nula", afirmó Guterres durante su discurso en el Día Mundial del Medio Ambiente.
Ante la creciente urgencia, Guterres instó a reducir la producción y uso de combustibles fósiles en un 30 por ciento para 2030. "Necesitamos una vía de escape de la autopista hacia el 'infierno climático'. La batalla por mantener el calentamiento global dentro de los 1.5 grados se decidirá en esta década".
A pesar de los acuerdos globales para reducir las emisiones y la rápida expansión de las energías renovables, las emisiones de dióxido de carbono provenientes de la quema de combustibles fósiles -la principal causa del cambio climático- alcanzaron un nivel récord el año pasado.
Fuente: La Jornada