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El Proyecto 22.421, presentado en el 2021 por diputadas del PAC, fue aprobado en forma unánime por Asamblea Legislativa.
La Asamblea Legislativa votó en forma unánime la aprobación del proyecto 22.421, «Menstruación y Justicia», con el cual se pretende reducir el costo de los productos de higiene menstrual, al otorgarle un Impuesto de Valor Agregado (IVA) preferencial.
El proyecto 22.421 también procura garantizar a las mujeres privadas de libertad el acceso a estos productos, y establecer el Día Nacional de la Higiene Menstrual, para concientizar sobre este tema y aumentar la conciencia sobre su importancia, evitando que quede en las sombras.
El proyecto fue presentado en marzo del 2021 por diputadas del Partido Acción Ciudadana (PAC), Carolina Hidalgo, Laura Guido, Paola Vega, Nielsen Pérez y Catalina Montero, pero fue retomado en la actual legislatura por diputadas de la Comisión de la Mujer.
«Entendemos que son temas tabú que no se hablaban en otros momentos, es necesario hacer justicia para incluir estos productos en la Canasta Básica y se les redujeran el precio. Es un tema de derechos humanos», comentó la diputada Luz Mary Alpízar, del Partido Progreso Social Democrático (PSD), quien solicitó el voto para el proyecto.
La iniciativa también fue respaldada por las diputadas Rocío Alfaro del Frente Amplio (FA), Johana Obando del Partido Liberal Progresista (PLP) y Monserrat Ruiz del Partido Liberación Nacional (PLN).
«Se trata de justicia, de que los productos que las mujeres requieren para sus procesos menstruales y sus costos sean reconocidos. Es un gran gasto, que golpea especialmente a las mujeres de escasos recursos y que las pueden excluir de aulas o lugares de trabajo», dijo Alfaro.
Obando resaltó que las mujeres generalmente enfrentan alrededor de cuatro décadas con procesos menstruales, con alrededor de 13 ciclos al año, por lo que se logró un consenso para procurar un alivio al bolsillo de las mujeres.
Por su parte Ruiz destacó que también se consideró la situación de las mujeres privadas de libertad, ya que en algunos casos solo se les dan tres toallas sanitarias para sobrellevar su período menstrual. «Es un tema de justicia, de derechos humanos», resaltó.
Fuente: Semanario Universidad