El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, realizó fuertes declaraciones este lunes al comparar al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, con el dictador nazi Adolf Hitler, calificándolo de "hijo del demonio". Estas afirmaciones se dieron durante un evento por el 45 aniversario de la Policía de Nicaragua, transmitido a nivel nacional.
Ortega no se detuvo en su crítica, extendiendo sus acusaciones hacia el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, a quien también describió como "hijo de Hitler". Según Ortega, Netanyahu ejerce una "política de terror" en Medio Oriente, aseverando que su mandato está orientado a "destruir a los pueblos".
El pasado viernes, el gobierno de Ortega rompió oficialmente relaciones diplomáticas con Israel, en un gesto de apoyo hacia Palestina y en conmemoración del año desde el inicio de un conflicto que Ortega describió como "genocidio" a manos de un "gobierno fascista y criminal de guerra" israelí. En un comunicado, la administración de Ortega, que incluye a su esposa, Rosario Murillo, destacó que esta decisión se fundamenta en una resolución aprobada por la Asamblea Nacional de Nicaragua, donde se condena el "continuo genocidio y el odio extremo" perpetrado por Israel.
El Parlamento nicaragüense había instado a Ortega a romper vínculos con Israel, declarándolo "enemigo de la humanidad". En su discurso, Ortega recordó que Hitler estaba convencido de la victoria de Alemania en la Segunda Guerra Mundial hasta su derrota ante la Unión Soviética.
Además, Ortega acusó a Estados Unidos y a la Unión Europea de armar a Israel, sugiriendo que esto solo llevaría a una "guerra total" en el planeta. "No les queda más que esperar la derrota", advirtió.
El mandatario, en un tono de lamento por la situación en Medio Oriente, hizo un llamado a poner fin al "genocidio" contra el pueblo palestino. "Celebro este aniversario con el corazón lleno de dolor por lo que está sucediendo", expresó.
En su crítica a Zelenski, Ortega lo tildó de "nazi" por intentar comprometer a la OTAN en un conflicto contra Rusia, acusando a la alianza de provocar al país ruso al instalar armamento nuclear en regiones sensibles.
Desde su regreso al poder en 2007, Ortega ha mantenido una postura cercana a Rusia, siendo este un antiguo aliado de Nicaragua que, durante la época del primer régimen sandinista, proporcionó armamento soviético a sus fuerzas armadas.
Fuente: SWI