La Contraloría y Transparencia Gubernamental de Nuevo León está llevando a cabo una investigación sobre el exgobernador Jaime Rodríguez Calderón, quien presuntamente omitió reportar la existencia de 57 inmuebles en sus declaraciones patrimoniales. Estos inmuebles son propiedad de él, de su entonces esposa y de uno de sus hijos, y 14 de ellos fueron adquiridos durante su gestión como gobernador.
Los documentos oficiales de la investigación señalan que Rodríguez Calderón habría incurrido en falsedad al ocultar el incremento en su patrimonio durante sus últimos tres años en el cargo. La Contraloría estableció que estas acciones podrían constituir una falta administrativa grave por enriquecimiento oculto, según lo dispuesto en la Ley General de Responsabilidades Administrativas.
Entre las propiedades no declaradas se encuentran diversas ubicadas en el municipio de García, donde el exmandatario fue presidente municipal, así como en otros lugares como Monterrey, Galeana, Saltillo y Ramos Arizpe, en el estado vecino de Coahuila.
Esta investigación se suma a las numerosas carpetas que ya tiene en su contra el exgobernador, incluidas las realizadas por la Auditoría Superior de la Federación en 2022, que identificaron posibles irregularidades por un monto cercano a los 48 millones de pesos en su cuenta pública del último año de gobierno.
Las acciones de la Contraloría se centran en determinar si Rodríguez Calderón cometió enriquecimiento oculto al no declarar estas propiedades durante su mandato como gobernador de Nuevo León.
Fuente: Milenio